Fotografías: KikeLindemann
¿Combinación de comedia, ópera rock y un viaje por la historia? ¡Sergio Arau lo hizo posible! El Lunario del Auditorio Nacional cambió de foro de conciertos a máquina del tiempo para transportar a los presentes a más de 300 años de historia musical con un espectáculo breve pero bastante disfrutable.
El pasado 28 de febrero, Arau tomó el antifaz de Laslo de la Vega Morris Balam Claus Viteli y Pavón para tomar su guitarra y llevar a su público por este repaso histórico por los espacios barrocos y clásicos de la cultura mundial.
Arau/Laslo salió al escenario vestido con ropa de linajes europeos, muy a la vieja usanza, adornado de un elegante y estrafalario saco y unos lentes bastante modernos para la época que quería retratar. Agradeció a los presentes, que por cierto estaban todos esparcidos por el foro en sus mesas bien distribuidas, y comenzó el show con «Tocada y fuga» (nombre del tema que bautiza su show), «Danubio blues» y una parodia musical con «Pozole mío».
El buen personaje de Sergio hacía comentarios ocurrentes que a más de uno le causó risa, con el sentido del humor que le caracteriza al chilango. «La cuarentona de Mozart», «Los bisnes» y «Apertura del Guille Motel» pusieron el destello de rock que aguardaba la noche de miércoles para deleite de sus seguidores.
La ópera rock contó la historia de Laslo, un músico que estaba extraviado por los ritmos de rock modernos y clásicos, que al buscar su identidad, encuentra una nueva manera de hacer sonidos.
Ya en la recta final sonaron «Paraliza» y «Alarma la de tos», el clásico de la Botellita de Jeréz para poner a bailar el rock legendario de esta esfinge del rock mexa.
