El reencuentro más esperado, Fall Out Boy volvió a sentir el cariño de México tras diez años.

El reencuentro más esperado, Fall Out Boy volvió a sentir el cariño de México tras diez años.

Txt:Kike Lindemann

Fotografias: Pablo Deyta/ocesa

Diez años después de aquel concierto que la banda ofreció en la Arena Ciudad de México, Fall Out Boy  tuvo un reencuentro más con sus fans mexicanos el pasado miércoles 25 de noviembre en el Palacio de los Deportes, en donde la intensidad de la banda se combinó perfectamente con la pasión de sus seguidores.

Esta vez la excusa de aquel encuentro fue la promoción de So much (for) Stardust, su onceavo álbum de estudio que salió en marzo del año pasado. Pero realmente no importó el motivo del concierto, pues sus verdaderos fans que los han apoyado a pesar de que el boom de los estadounidenses ya se desvaneció, estuvieron presentes en el recinto de Iztacalco.

Esta fue una noche emo-cional porque, aunque dicen que sólo fue una etapa,  el amor por la música de esta banda sigue vigente en la actualidad. Previo al acto estelar, los fans tuvieron la presencia de Jimmy Eat World, una banda muy poco conocida pero que dejó un buen sabor de boca con temas como The Middle, sweetness, Pain, Hear you me entre otros.

Decir que su público estaba realmente entusiasmado, es poco. La emoción y la expectativa era palpable en el ambiente y en cada uno de los que asistieron a este foro, que en aquel show lució un sold out. Y justo esa emoción no tardó en manifestarse cuando Patrick Stump, Pete Wentz, Joe Trohman y Andrew Hurley, llegaron al escenario en medio de un caótico grito colectivo y un mar de celulares.

Sí, por desgracia los celulares no tardaron en aparecer para entorpecer la vista de muchos fanáticos. Aún así, hubo quienes dejaron su móviles guardaditos para saltar junto a los potentes riffs de “Chicago”, “Where’s your boy”  y “Sugar, We’re Goin Down” una de las rolas que destacó de su disco From under the cork tree (2005). Cabe mencionar que cada rola era representada con cada disco que pertenecía en la escenografía.

Patrick dibujó en su rostro una sonrisa que lo acompañó en cada rola desde el principio. Y es que Patrick al igual que el resto de la banda, volvió a sentir la entrega de los fans mexas que se pusieron bien locos coreando “Dance Dance”, ”16 Candles” y esa rola que conocimos hace casi 19 años atrás, “Get busy”.

La energía y euforia de la banda nunca paró pues todos sus seguidores los extrañaron bastante y se hicieron sonar con fuerza “Arms race”, “Doldrums”,”Buffalos” y “ Stardust” Más allá de sacar nuestra intensidad, estas rolas también nos prepararon para el cierre de un show bastante especial.

Pero, ¿cómo termina un show de Fall Out Boy? Fácil, con “Fake out” .Todos en el Domo de Cobre, recordaron la adolescencia o infancia -sea cual sea el caso- al oír estos verdaderos himnos ‘dosmillero’, que Patrick y compañía utilizaron para interactuar un poco con su público.

Después de escuchar esta gran rola, muchos pensaríamos que sería el fin de su concierto, pero no, aún hubo un poco más. Tras escuchar “Centuries”, Fall Out Boy  ahora sí terminó su reencuentro con sus fans mexicanos a ritmo de  “Saturday”. Con la promesa de un pronto regreso a la CDMX, estos estadounidenses volvieron a reafirmar el cariño y fidelidad que sus fans mexicanos tienen en cada visita y que la etapa emo no ha muerto.

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