Txt: Luis Angel Grace
Fotografías:OCESA / Lulú Urdapilleta
Alguien ha entrado al museo de Lasso y ha robado uno de sus preciados tesoros: el amor de su vida. El artista caraqueño recibió los reflectores y buena vibra de una generación de nuevos amantes de los conciertos el pasado 2 de febrero en uno de los lugares ritualísticos más espectaculares del centro de la ciudad: el Teatro Metropólitan, en medio de su gira Quedarte solo para siempre.
La venta de las localidades se anunció como agotada desde semanas antes de uno de los días más especiales de Andrés, el artista que no se limita en un único género musical: rock, pop, electro, todos los estilos se funden en melodías pegajosas e irreales.
El escenario fue sede del museo de Lasso, un sitio que abrió con la conjugación de todas las zonas artísticas y que fue objeto de un asalto, entre todos los cuadros exhibidos en esta galería un ladrón entró y hurtó de entre las recuerdos de Andrés a Eva, la personificación del amor de su vida (y también el nombre de su último disco estrenado en 2023).
«Bienvenidos al museo de Lasso, todos ustedes se encuentran en el museo de mi vida, aquí tenemos guardadas las memorias de todas las personas que han estado en mi vida, incluyendo a mis ex» comentó el cantante y guitarrista al salir a escena entre vítores enaltecidos con gritos elogiando su presencia.
«Quédate con él» y «Vamos a mí ritmo» fueron el puntapié que inició la hazaña del cantante al debutar en el Metropólitan. El show que, por cierto, estaba siendo grabado desde distintas tomas para recoger el material audiovisual de esta tremenda presentación. La banda salió uniformada de seguridad del museo, para ayudar a detener al ladrón y hacer bailar con otros temas como «Perdón pero no te perdono», «No pares de bailar» y «Dios», esta última canción a dueto con Humbe.
Azul, Carolina y Julia son los nombres de las tres ex novias principales de Lasso, y entre ellas quedaba el enigma de quién tomaba el antifaz de Eva, el amor de la vida del cantante.
La primera ex novia había sido una relación importante para Lasso, la segunda ex le rompió el corazón en mil pedazos, y la tercera jugó con él.
«Diferente», «Te veo» y «Feliz por ti» fueron otras canciones que sonaron en la búsqueda del amor de su vida.
«En esta parte de la canción saltamos hasta no poder más» comentó Lasso al dejar al Metropólitan eufórico con «Corriendo con tijeras», una rola donde el cantante aprovechó para interactuar todavía más con su público, midiendo los decibeles del escándalo causado en el lugar.
Una kiss cam apuntó a varias parejas de enamorados para mostrar los besos de cariño durante la ejecución de «Hasta ese día». «Todo regresa» también fue un momento emotivo que el público le dio al cantante, ya que varias personas mostraron globos blancos y azules que adornaron a juego las luces del museo.
Llegó el instante de la verdad para capturar al ladrón y recuperar el tan preciado recuerdo de Lasso. La canción «Eva» sonó cuando la seguridad del museo encontró el cuadro del amor de su vida: ese cariño que fue generando desde sus tres ex novias y que había terminado con su público presente en el Teatro Metropólitan. El amor verdadero es el de sus fans.
Después de más de dos horas de concierto, Lasso se despidió con su más grande éxito hasta la fecha: «Ojos marrones», y agradeció el hecho de que sus fans le ayudasen a cumplir el sueño de llenar el foro de la colonia centro.